Muchas veces ocurre que planteamos lo que “parece” que quiere el consumidor, sin profundizar y nos quedamos en lo superficial.
La realización de un mapa de empatía no suele superar los 30 minutos y se recomienda hacerlo en grupo. Conoce mucho más a tus clientes y lo que quieren.
¿Qué es el Mapa de Empatía?
El Mapa de Empatía se basa como su propio nombre indica en la empatía y sirve para entender mejor al cliente o público objetivo. Queremos saber de todo acerca del consumidor, sus conocimientos más profundos, su personalidad, su entorno, su visión del mundo, necesidades y deseos.
Muchas veces como marketeros o publicistas creemos estar seguros de lo que nuestros clientes quieren y tomamos acciones en torno a ello sin profundizar y nos quedamos en lo superficial. Con este mapa podemos entrar y entender qué quiere realmente.
¿Cómo hacer un Mapa de Empatía?
Fase 1: segmentación.
Debemos agrupar a nuestro público en función de una serie de características o atributos comunes (edad, género, situación laboral, intereses) que formen diferentes grupos, teniendo un promedio entre 2 a 4 grupos o segmentos de clientes.
Fase 2: personalización o humanización.
Se identifica a una persona de cada segmento asignándole características o atributos concretos: su nombre, dónde vive, su trabajo, vida familiar, aspiraciones, etc.
Fase 3: empatizar.
En esta fase se trata de ponerse en los zapatos de la persona, de nuestro público objetivo, haciéndonos diferentes preguntas relativas a sus pensamientos, sentimientos, su entorno, etc.
Cuestiónate: ¿Qué ve?, ¿Qué oye?, ¿Qué dice o qué hace?, ¿Qué piensa y qué siente?, ¿Cuáles son los esfuerzos que realiza?, ¿Cuáles son los resultados y/o beneficios que espera obtener?
Fase 4: validación.
Una vez que hemos terminado el mapa de empatía deberíamos servirnos de la investigación cuantitativa o cualitativa para comprobar si nuestras hipótesis son ciertas o no.